Las tres unidades de desalinización de agua de mar que abastecían las islas de agua potable - 5.000 m3 diarios en Saint Martin y dos veces 2.000 m3 diarios en Saint Barthélémy - sufrieron graves daños. La evaluación de daños está en marcha. Las soluciones temporales se implementarán lo antes posible, antes de reiniciar completamente las plantas que será probablemente en unos meses.
"Tenemos cerca de 40 empleados en la planta y nuestro principal objetivo es ponernos en contacto con todos y cada uno de ellos para asegurarse de que ellos y sus familias están a salvo", dijo Antoine Frérot, Presidente y CEO de Veolia. "Estos equipos serán reforzados por nuestros expertos en desalación y gestión de crisis, estamos movilizando actualmente todos los recursos disponibles del Grupo para responder a la emergencia y en particular a los utilizados por nuestra Fundación en emergencias humanitarias".